La Caléndula
desabrigaba descarada
desabrigaba descarada
sus hojuelas lenticulares,
lucía, casquivana,
matices anaranjados
lucía, casquivana,
matices anaranjados
dejando ver sin recato
su cuerpo jubiloso.
su cuerpo jubiloso.
Era un
cálido día
de octubre.
Impetuoso,
al otro lado del vago cristal,
al otro lado del vago cristal,
un Ópalo,
perseverante e irisado,
perseverante e irisado,
se debatía por ser pétreo cuarzo:
exhibía sobresaliente verbo,
y exquisita gracia del sur.
Era un
cálido día
de octubre.
"Brote de otoño,
galopa conmigo,
monta a la grupa
de este corcel gallardo;
colmados de amor
cabalgaremos anhelantes
a la villa nívea de Gadeíra:
la hermosa sirena del océano.
De piel de león
confeccionarán nuestros vestidos;
escoltarán nuestro amorío
beduinos y tirillas;
idilio sustentado
por columnas de lechosa plata;
conquistaremos el edén
cogidos de la mano;
las bocas, pletóricas,
se fundirán en besos de melaza".
Era un
cálido día
de octubre.
Asunción
Era un
cálido día
de octubre.
"Brote de otoño,
galopa conmigo,
monta a la grupa
de este corcel gallardo;
colmados de amor
cabalgaremos anhelantes
a la villa nívea de Gadeíra:
la hermosa sirena del océano.
De piel de león
confeccionarán nuestros vestidos;
escoltarán nuestro amorío
beduinos y tirillas;
idilio sustentado
por columnas de lechosa plata;
conquistaremos el edén
cogidos de la mano;
las bocas, pletóricas,
se fundirán en besos de melaza".
Era un
cálido día
de octubre.
Asunción
Me gusta, enhorabuena por su blog.Saludos
ResponderEliminarSe agradece, Antonio.
ResponderEliminarUn abrazo. ☺
Eres una fenomena
ResponderEliminarMuchas gracias, Inmita.
EliminarEres una fenomena
ResponderEliminar